El cordobés estaba llamado a silencio y esperó que largara el campeonato mundial de Fórmula 1 para salir a dar la cara. Ayer lo hizo y se lo notaba muy triste. Junto a su padre, a Víctor Rosso y al empresario Felipe McGough (ex periodista de VideoMatch con Tinelli en sus arranques) el excelente piloto cordobés decía en un tono muy poco acorde con las palabras que "la idea es no bajar los brazos" luego de las idas y venidas en que lo tuvieron esta temporada con el fallido intento de pilotar un F1 del frustrado equipo norteamericano USF1.
Le hicieron pocas preguntas porque el cordobés se extendía en un tono monocorde que reflejaba su estado de ánimo.
"Hubo muchas cosas que no pensamos que iban a pasar, creo que hasta la FIA se cayó atrás de esto y el mismo Ecclestone quien dijo que había dificultades, pero nunca que no iba a ser", expresó. "Se puede decir que se hizo todo lo humanamente posible. Yo vi como se fueron haciendo las cosas en Europa y en Estados Unidos", agregó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario